Algunas personas creen que los juegos de rol son algo malo, dañino, que intenta relacionarte con sectas, espiritismo o actividades de esa índole. Cuando el rol es una de tus aficiones favoritas, lamentablemente es fácil encontrarse con gente que desconoce realmente lo que es el rol y tiene una idea equivocada de ello. Para todos los que no saben de qué estamos hablando, lo mejor será empezar por el inicio de todos estos conceptos...
En lo que se conoce terapéuticamente como la interpretación de roles, los participantes adoptan e interpretan el papel o rol de un personaje, parte o grupo que puede presentar personalidades, motivaciones y trasfondos diferentes de los suyos propios. La interpretación de roles es similar al drama improvisado o teatro delimitado por unas reglas externas en el cual los participantes son los actores, interpretando roles de una forma libre dentro de supuestos y entornos constreñidos inicialmente, y son la audiencia al mismo tiempo.
Este tipo de actividad es muy cercana a la interpretación artística, pero debe diferenciarse de ésta aunque en las dos se interpreten papeles (o roles). En la interpretación artística los actores se ciñen a una historia lineal, determinada por un guion, el director no puede interrumpir la obra y el final está determinado por su autor, generalmente externo al grupo. Además, la interpretación artística es hacia un público que, salvo excepciones, no participa, sino que se limita a contemplar y valorar la interpretación de actores, músicos o cantantes de una obra que es en sí un producto artístico independiente de la representación.
En cambio, la interpretación de roles es más libre, ya que no existe guion para los participantes, pero sí una delimitación de circunstancias y entornos controlados por un árbitro (o juez o máster) que puede dar por terminada la interpretación cuando se alcanza un fin determinado o un conflicto irresoluble. Además, la interpretación de roles es cooperativa y todos sus participantes son actores y espectadores en el proceso. Los roles son futuros aproximados a la declaración de cómo comprender o interpretar cada personaje y sus valores, personalidad, etc.
Los elementos fundamentales de la interpretación de roles son la cooperación entre sus participantes durante el proceso, la incorporación de un conflicto sobre el que "actuar" y la asignación de papeles, la presencia de un árbitro que delimite el entorno y la circunstancia a recrear junto con la intencionalidad de la misma para conseguir una finalidad u objetivo determinado tras una sesión.
La interpretación de roles puede referirse a:
- Una herramienta terapéutica para ayudar a solventar problemas psicológicos.
- La interpretación de roles en general en un ambiente educativo.
- Una actividad destinada al entrenamiento en ámbitos militares, políticos y empresariales.
- Los juegos de rol en específico.
- Una amplia variedad de juegos que incluyen a los videojuegos de rol y los juegos por correo.
Esto cambia bastante las cosas para las creencias populares, ¿verdad? Pero aún pueden pensar “diferencian entre juegos de rol, videojuegos y el plano educativo y formativo, ¿Por qué?”. Es fácil: Muchos psicólogos, tanto en colegios como institutos, empresas, etc., utilizan la técnica de la interpretación de roles sobre todo con el objetivo de que las personas comprendan cómo se sienten los demás (el estrés que puede llegar a asumir un jefe, la frustración de un empleado cuyas ideas no escucha nadie, lo mal que se siente un niño por las burlas de sus compañeros, lo bueno que es compartir…). En el ámbito profesional están claros sus objetivos, pero… ¿y si se utilizara para un objetivo lúdico, de entretenimiento, en vez de ser sólo una herramienta laboral? Aquí es cuando aparecen los juegos de rol propiamente dichos.
“¿Y si en vez de interpretar a una persona normal, interpreto a un héroe de libro con unas increíbles habilidades? ¿Y si en vez de estar en una oficina, estoy en un mundo ficticio en otra época?”. Estas ideas fueron las primeras que hicieron resurgir los juegos de rol. En las décadas de los 60 y 70 comenzaron a desarrollarse juegos medievales entre los que se destaca Dungeons & Dragons por su fama. Fue lo que dio origen a los primeros juegos de rol modernos para posteriormente expandirse en los 80 y sofisticarse en los 90, momento en el que se extendería al mundo informático y los videojuegos, seguido de un declive que remontó en el nuevo siglo con más compañías y los llamados “Juegos Independientes”. Pero, ¿en qué consiste un juego de rol? ¿Cómo se practica realmente?
Estas preguntas son fáciles de responder. El juego se practica con un conjunto de personas donde la mayoría son jugadores. Son los que crean a los personajes protagonistas dándoles una apariencia, psicología y habilidades concretas. Una persona ejecutará el papel de Narrador o Director de Juego (también llamado “máster”). Éste no crea un personaje para sí mismo, sino que imagina el argumento y los conflictos, estableciendo el escenario dramático en el que los jugadores dirigirán a sus personajes, además de interpretar los papeles de personajes secundarios con los que se irán encontrando los protagonistas. El narrador creará todos los detalles y descripciones necesarias para ambientar y meter en situación a los jugadores, por lo que no solo deberá conocer al dedillo todas las reglas del juego que se practique, sino que además deberá estar preparado para la sesión de juego.
Se considera un juego de mesa por que se suele practicar sobre una, aunque un juego de rol es diálogo, utilización de la imaginación y lanzamiento de dados, nada más. Ocasionalmente se juega con un tablero para ubicar mejor a los personajes y sus enemigos en el espacio. En ningún momento hay armas, objetos punzantes, animales, interpretación con gestos ni nada por el estilo; es un juego narrativo. Esta es la variante más conocida de juego de rol, pero existe una más: el rol en vivo. Esta forma guarda semejanzas con el teatro de improvisación, puesto que los jugadores se visten y actúan como sus personajes, participando en las escenas como si fueran los actores de una obra. El narrador guía todas las acciones y dirige el argumento, prepara las características especiales del escenario, supervisa todos los desafíos a los que se enfrentan los jugadores y puede interrumpir la acción siempre que lo considere oportuno. Esta modalidad no usa dados, la mayoría de las situaciones se resuelven por medio de la actuación y de las decisiones del Narrador. Esta modalidad, aparte de necesitar más gente por ser más complicada, tiene unas reglas especiales y nunca quebrantables como prohibido tocar, prohibido las armas, jugar en áreas predefinidas, recordar que solo es un juego y en el caso de ser en la calle no molestar a transeúntes de esta y poseer los permisos adecuados para ello.
“Pero, un momento ¿sigues diferenciando los videojuegos de estos juegos de rol?”. Exacto. Algunos no quieren hacerlo, pero nuestro criterio es el siguiente: en pocos de estos juegos puedes hacer con tu personaje verdaderamente las libertades de acciones que desees, siempre estarás limitado a unos controles y unos escenarios programados para tal juego, por lo que ¿es un juego de rol? Sí y No. El sistema lo tiene, pero no la libertad que tendrías en un juego de mesa o en vivo. Diriges el desarrollo de tu personaje y las decisiones que va a tomar. No por ellos son peores o malos, todo lo contrario, también son un gran entretenimiento pero ya sabes lo que dicen: el poder de la imaginación no tiene límites.